Denominaré PASADO, PRESENTE y PORVENIR a tres personas sentadas en torno de una mesa en la que hay dos tazas, un vaso y un paquete de cigarrillos. Para ocultar la turbación que me produce este encuentro finjo ser circular, girando simplemente sobre uno de mis talones y cuando arrebatado por mi propio vértigo desesperaba de detenerme se abrió una puerta y entré en la inmortalidad, es decir, en una habitación negra, en la cual los hombres giraban velozmente sobre sus talones
Aldo Pellegrini